Uno de los principales problemas que se nos pueden
presentar cuando realizamos dietas de adelgazamiento debido a la falta de
algunos nutrientes y la fibra necesaria es el estreñimiento.
El lino contiene
una cantidad de fibra superior a cualquier otro cereal y por ello es muy
recomendado en dietas de reducción de peso, reducción de colesterol y prevenir
este estreñimiento.
Contiene omega 3 en cantidades superiores al del
pescado o cualquier vegetal o cereal, aunque es necesario que nuestro cuerpo lo
transforme para obtener una total asimilación, así que lo mejor es combinarlo
con una fuente más asimilable y esto es a través de pescado y mariscos.
Otro punto a tener en cuenta son la serie de
propiedades que posee, entre las que destacaremos su valor diurético, ya que
estos ácidos grasos lo que harán será estimular a los riñones y ayudarlos a la
hora de eliminar el exceso de líquidos y toxinas que se acumulan en el
organismo.
El lino también puede reducir el estrógeno en las células grasas,
limitar el efecto de estímulo del estrógeno, prolongar el período menstrual y
aumentar el número de transportadores de estrógeno.
Aunque existen estudios contradictorios respecto al
lino, además de su efecto laxante y saciante, se le atribuye beneficios sobre algunas otras enfermedades
como:
Enfermedades inflamatorias, piel y cabello, estrés,
diabetes, digestión, enfermedades cardíacas, sobrepeso, problemas sexuales,
vitalidad, retención de líquidos, función visual, función adrenal, formación de
esperma, fibrosis quística, esclerosis múltiple, esterilidad, aborto,
esquizofrenia, mal funcionamiento glandular, depresión bipolar, alérgias,
adicciones a drogas y alcohol.
El modo de tomar las semillas de lino es simple,
solo hay que tomar unos 25 gramos diarios, triturados para poder asimilar mejor
todos sus nutrientes, tomándose con abundante agua si lo que queremos es
aprovechar su efecto laxante.
Un saludo.
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